Reseña: Los tres cerditos solo querían vivir tranquilos
en el bosque sin que nadie los moleste. ¡Pero no! ¡Tenía
que venir el insoportable del lobo, que se cree muy
feroz, a soplar y derribar las casitas que ellos mismos
habían construido! Claro que no le fue tan fácil con la
casa del cerdo mayor que, además de ser de ladrillos,
cuenta con la protección de la Agencia Internacional de
Cuentos Tradicionales. Al lobo parece no importarle y
comienza a intentar derribar la casa. Y pasó lo que tenía
que pasar. Bueno, en realidad, pasaron un montón de
cosas.