Se sugiere realizar refuerzos en aquellos lugares críticos tales como desagües, encuentro de pisos y muros, babetas, ángulos y también sobre juntas de dilatación, previamente selladas, o sobre microfisuras con pequeños movimientos, utilizando un refuerzo geotextil. El mismo se colocará embebido entre la primera y segunda mano pura, aplicado mientras el recubrimiento se encuentre húmedo, presionando levemente con un rodillo cargado con el producto, para que la tela se sature y libere las burbujas atrapadas.