Reseña: El sistema de dominación impuesto por la
oligarquía argentina desde 1852 no sólo incluyó acuerdos
espurios y el exterminio de los grupos étnicos y sociales
que la incomodaban, sino también la construcción de un
sistema educativo y un conjunto de representaciones
sociales que le permitieron manipular exitosamente la
conciencia popular, estableciendo un tramado ideológico
que naturalizó la dominación y el colonialismo cultural y
cuyos orígenes pueden rastrearse en los tiempos
coloniales.