Reseña: Un médico treinteañero se enamora de una paciente que no le pide ayuda profesional, sino humana: no soporta a su marido, un pastor al que el médico le resulta hostil. A la vez, ella confiesa tener un amante, por lo que cualquier fantasía de concretar su amor se vuelve inútil. Glas se enfrenta a sucesivos dilemas éticos. Escrita en 1905, esta obra se anticipa a Freud, el surrealismo, Bergman y, sobre todo, al existencialismo, en el que Glas aparece como un claro antecedente de Mersault.